“Yo soy el buen Pastor, el buen Pastor su vida da por las ovejas”. Juan 10:11. Hay un rebaño al que Jesús nos dio entrada para ser sus ovejas.

Introducción

El diccionario de la lengua de la Real Academia Española define lo siguiente:

Pastor, ra. (Del Lat. pastor, -ōris). m. y f. Persona que guarda, guía y apacienta el ganado, especialmente el de ovejas.      

Esta definición no está lejos de la profecía bíblica que habla del amor de Jesús como un tierno pastor. Leer Isaías 40:11

En este pasaje de las S.S.E.E Jesús declara a sus discípulos que él es “el buen pastor” y como buen pastor se presenta como quien guía y apacienta su rebaño. Entenderemos que las personas que sigue a Jesús es una oveja y el conjunto de ellas es su rebaño.

¿Por qué se presenta Jesús como el Buen Pastor?

Para el entendimiento espiritual del hombre, muchas veces Jesús se representó en cosas que pueden ser fácilmente entendidas por el hombre, como cuando se presenta como el pan de vida, como el camino, como la roca etc. Representándose en estas cosas que el hombre conoce y puede comprender, Jesús pretende que todos puedan entender su gran amor. Por esto Jesús se declara como un pastor, para que la gente de aquella época pudiera comprender su misión de guiar y cuidar a quienes el Padre les entrego en su mano, como lo hace un pastor con sus ovejas. Y aun más...Jesús como buen pastor su vida da por sus ovejas.

¿Quiénes son las ovejas del Buen Pastor?

En el mismo evangelio escrito por Juan encontramos la respuesta.

Leer Juan 10:16.       Podemos visualizar las ovejas de Jesús en dos rebaños.

Al decir “Tengo otras ovejas que no son de este redil” nos enseña dos cosas

  1. Jesús señala que el redil es el pueblo de Israel y las ovejas las personas que viven en Israel
  2. Las otras ovejas que no son de ese redil somos los gentiles del mundo entero, es decir los no israelitas de sangre.
    1. Para entrar al redil existe una Leer Juan 10: 1 al 9

El amor maravilloso del Buen Pastor es declarado cuando el Señor manifiesta que a esas ovejas que no son de Israel, a ellas también les conviene traer. En ese momento cuando el Maestro pronuncio estas palabras de vida, ya estábamos presentes en su amor cada uno de nosotros. He aquí se nos abre la puerta y la oportunidad de entrar al redil de Israel y ser juntamente ovejas en un solo rebaño y con un solo Pastor...Jesucristo nuestro Señor.

¿Cómo entrar a este rebaño para ser sus ovejas?

Todos quienes buscan a Jesús pueden llegar a ser sus ovejas, no hay límite en su rebaño, pues en su amor infinito el buen Pastor dio su propia vida por todas sus ovejas. En aquel entonces las personas que siguieron al Señor fueron vistas por el como “ovejas sin pastor.” Leer Marcos 6:34. Así como estas personas siguieron a Jesús nosotros sigámosle también porque él no nos dejara solos vagando en el mundo, sino que será nuestro Pastor y nos alimentara con los mejores pastos que son sus enseñanzas.

Tú y Yo podemos ser ovejas de su prado como El nos enseña en sus palabras de Vida:

El buen pastor dio su vida por las ovejas. En su muerte nos da la entrada al redil y no podemos olvidar la muerte tan dolorosa que sufrió el Buen Pastor. Leer Isaías 53: 3 al 7 Escuchemos sus palabras de vida que nos invitan a entrar allí.

El Señor nos enseña amorosamente que El mismo es la puerta para entrar al corral de las ovejas. La manera de entrar es creyendo en el como el salvador que murió por cada uno de nosotros y como el Señor que demanda obediencia y fidelidad.

 Aceptemos a Jesús el unigénito del Padre como nuestro salvador y Señor. Tenemos la entrada a su rebaño, estando en el saldremos fuera del mundo y hallaremos pastos. Pues siguiendo a Jesús y escuchando en su voz las palabras de vida seremos salvos. En su muerte Jesús nos dio entrada a su pueblo de Israel y por lo tanto tenemos que andar en sus leyes.

En el acto de bautismo entramos libremente al redil. Mientras no nos bauticemos somos ovejas queriendo entrar. El Pastor anhela guiarnos y apacentarnos, lo que tú y yo debemos hacer es seguirle ahora.

Jesús como pastor nos guía y protege del peligro. Y así como las ovejas de los campos son acechadas por lobos y leones, el rebaño espiritual de Jesús es asechado por el peligro.

Hay un león que nos quiere devorar. Leer 1era Pedro 5:8

Todos en algún momento hemos podido observar en TV algún documental de naturaleza en donde se muestra la persecución a las manadas atacadas por leones, chitas o hienas. En la mayoría de las ocasiones los leones atacan a los animales que se han quedado atrás de la manada o están heridos. Así este león rugiente que es el diablo anda buscando a quien devorar, es decir encontrar a una oveja que se alejó del rebaño por no seguir al buen pastor o que está herida por las espinas en el camino. El diablo sabe que no puede entrar al redil con libertad porque quien está en la puerta ya le derroto, pero busca a algún hermano o a un joven que se ha apartado de la iglesia para atacarlo y así dañar al redil.

Tengamos cuidado de que a causa de nuestros planes ajenos a la voluntad de Dios no estemos escuchando las palabras de vida del Buen Pastor que nos invita a seguirle. Lejos de Dios y de la iglesia estamos muy propensos a ser devorados espiritualmente.

El rey David se sentía como oveja del Señor y se refugiaba en Dios como su pastor. Él lo expresa hermosamente en el Salmo 23(leer).

Analicemos este capítulo.

“Jehová es mi pastor nada me faltara”   David tenía la certeza de que Dios lo sostendría en todo y confiaba en que nada le faltaría. Esta debe ser nuestra fe. Si permanecemos en el rebaño Jehová será nuestro pastor y suplirá toda necesidad que podamos tener en el camino.

“En lugares de delicados pastos me hará descansar”. El Señor nos ha prometido pastos delicados y eternos en el reino de los cielos para ser guiados y apacentados por siempre.

“Junto a aguas de reposo me pastoreara, confortara mi alma por amor de su nombre”   La palabra de Dios es agua que da reposo a quienes la disfrutan. Las aguas de reposo son las palabras de vida de Cristo.

“Aunque ande en valles de sombra de muerte no temeré mal alguno...”

A veces nos toca caminar por estos valles para llegar a los mejores pastos y no porque el buen Pastor quiera llevarnos por ahí, pues un rebaño tiene que pasar por terrenos difíciles para llegar a destino.

Este valle de sombra de muerte es el mundo y su pecado. Tenemos que pasar por el mundo sin hacerle el quite, para llegar a los pastos eternos. El Señor nos mantiene en su rebaño y como el pastor usa el cayado y la vara para guiar a sus ovejas, el Señor también nos toca con la vara y nos pone el cayado al cuello cuando nos quedamos atrás en el valle del mundo y lo hace por amor porque es el buen pastor y no quiere que ninguna oveja se pierda en la muerte.

No esperemos recibir la vara y el cayado de Dios para estar en su rebaño. Sigamos a Jesús y él nos guiara y apacentara al reino. Nos alimentara con los mejores pastos que son sus Palabras de Vida. Este día sea nuestro pensar en las palabras de vida: “Yo soy el buen pastor, el buen Pastor su vida por las ovejas.”

Conclusión

Cada día tenemos la oportunidad de ser sus ovejas escuchemos las palabras de Jesús y vivamos nuestra vida siguiéndole y recibiendo sus cuidados amorosos. Aún más hay una promesa alentadora para nosotros en las palabras de vida de Jesús; Cuando dijo que habrá un solo rebaño y un solo pastor, se refiere al día en que seremos uno con los israelitas, cuando ellos acepten a Jesús y le reconozcan como su pastor, habitaremos juntos en el redil de Dios: en la tierra de Israel prometida a Abraham. Leer Jeremías 31: 10, 11 y 12.

Palabras de vida para nuestros oídos es el llamado de Jesús a ser sus ovejas. El dio su vida para liberarnos de la muerte y así darnos la oportunidad de vida eterna siendo sus ovejas. Vivamos siguiendo al Buen Pastor, obedeciendo sus leyes y concejos que nos da en las S.S.E.E, pues así nos ira bien en todo y hallaremos el mayor gozo que es estar en los brazos de un tierno pastor.

Preguntas del Estudio.

1.- ¿Qué aprendí hoy sobre Jesús como mi pastor?

2.- ¿Qué beneficios tengo al ser oveja de Jesús?

3.- ¿Cómo hay entrada al rebaño de Israel?

4.- Las Palabras de vida que aprendí son:

 

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